Maurice Maeterlinck nos invita a reparar en el sugerente mundo de las flores .
Cuando la flor hizo su aparición en la tierra, no había en torno de ella ningún modelo que poder imitar ; tuvo que inventarlo todo .
La flor da al hombre un prodigioso ejemplo de insumisión , de valor , de perseverancia y de ingeniosidad.
Se rebela contra su inmovilidad , escapar por arriba a la fatalidad de abajo , quebrantar la pesada y sombría ley...